Me enamoré de él, pero no me quedo con él por inercia, como si no hubiera nada más a mi disposición.
Me quedo con él porque así lo elijo cada mañana al despertarme, todos los días que nos peleamos, nos mentimos o nos decepcionamos. Lo elijo a él una y otra vez, y él me elige a mi.
No hay comentarios:
Publicar un comentario